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I. INTRODUCCION.
El año de 1976, tercero de vida de la Universidad y prácticamente
el segundo de actividad académica formal, puede considerarse como uno
que marca el inicio de la etapa de consolidación institucional, la que
exige el mantenimiento de altos niveles académicos, un mayor acercamiento
a nuestra realidad social, una adecuada utilización de los recursos disponibles
y la creación de normas y disposiciones que rijan los diversos aspectos
de la vida universitaria.
Las actividades que se reportan en este informe deben ser analizadas dentro
de un marco general de desarrollo de la Universidad cuyas características
más sobresalientes son las siguientes:
a) un rápido crecimiento de la Institución, tanto en lo relativo
a población escolar, que se incrementó en casi 70 por ciento,
como en lo concerniente a su personal académico y administrativo, que
aumentó en un 25 por ciento.
b) un crecimiento apreciable de sus instalaciones físicas que, atendiendo
en primera instancia las necesidades generadas por sus programas de docencia,
se extendió a la construcción de la primer etapa de instalaciones
definitivas para laboratorios de investigación y oficinas para el personal
académico.
c) un esfuerzo decidido en el área académica para la terminación
de la elaboración de los planes de estudio de licenciaturas y maestrías
y de los programas detallados de asignaturas y módulos, y de su revisión
y aprobación por los cuerpos colegiados de las distintas Unidades.
d) un impulso firme a los trabajos de investigación en áreas cada
vez más amplias de los campos correspondientes a las distintas Divisiones,
mediante una inversión fuerte en equipos de laboratorio y en materiales
bibliográficos.
e) el inicio por el Colegio Académico de la actividad de reglamentación
requerida para regular el funcionamiento académico de la Universidad,
con una amplia participación de los distintos sectores que integran la
comunidad universitaria.
f) el establecimiento formal de las relaciones laborales de la Institución
con sus trabajadores a través de su representación sindical, y
la expedición de las Condiciones Generales de Trabajo.
g) los problemas de índole económico generados por la crisis ocurrida
en el país y, en especial, por la inflación y la devaluación
de la moneda nacional.
Las actividades que, en forma resumida, se reseñan en este informe son
el resultado de la labor conjunta de todos los que, en uno u otro sector, formamos
parte de la comunidad de la Universidad Autónoma Metropolitana, y en
consecuencia los logros indicados, y las deficiencias, que sin duda también
las hay, nos corresponden, en mayor o menor grado, a todos.
Podría resumirse este informe, señalando que a pesar de los serios
problemas que la Institución debió sortear en 1976, en particular
los relativos al establecimiento de las relaciones laborales con la representación
sindical de los trabajadores de la Institución, y los derivados de la
crisis económica general del país, la Universidad avanzó
en forma importante en la tarea fundamental de consolidarse como una Casa de
Estudios que, fiel a su lema, viene a aportar nuevos y valiosos caminos en el
desarrollo de las funciones que la sociedad ha asignado a las instituciones
de educación superior: la formación de profesionales, la investigación
y la creación, preservación y difusión de la cultura.