RECTOR DE LA UNIDAD AZCAPOTZALCO
Mtro. Víctor Sosa Godínez
(09 de julio de 2001-
Discurso pronunciado en su toma de posesión.
Buenas tardes.
Dra. Blanca Ramírez Velázquez, Presidenta en Turno de la H. Junta Directiva de la UAM y miembros de ella.
Ing. Alberto Sánchez Palazuelos presidente del Patronato de nuestra Universidad y miembros del mismo aquí presentes.
Dr. José Luis Gázquez Mateos, Rector General de nuestra casa de estudios.
Lic. Edmundo Jacobo Molina, Secretario General de la UAM.
Mtra. Mónica de la Garza Malo, Rectora de la UAM-Azcapotzalco.
Lic Guillermo Ejea, Secretario de la Unidad Azcapotzalco.
Dr. Luis Mier y Terán, Rector de la UAM-Iztapalapa.
Dra. Patricia Aceves Pastrana, Rectora de la UAM Xochimilco.
Mtro. Eduardo Campero Littlewod, Director de la División de Ciencias Básicas e Ingeniería.
Mtro. Héctor Schwabe Mayagoitia, Director de la División de Ciencias y Artes para el Diseño.
Señores Jefes de Departamento.
Miembros de nuestra comunidad universitaria.
Familiares que me acompañan en esta ocasión.
En una sociedad en donde la incertidumbre constituye una constante para sus miembros, su futuro debe ser enfrentado con estrategias que permitan una mayor participación de quienes la conforman en esquemas institucionales flexibles y reglamentados. En un escenario de este tipo, estoy convencido que las aportaciones de las universidades públicas son indispensables para generar una sociedad con acceso al bienestar, humanista y democrática, fundamentada en el respeto a los demás.
Agradezco a los integrantes de la Junta Directiva, al Dr. José Luis Gázquez Mateos y a los miembros de la Comunidad Universitaria, por la confianza que han depositado en mí para dirigir la Unidad Azcapotzalco en el periodo 2001-2005.
Reconozco la labor de la Maestra Mónica de la Garza Malo, quien en el ejercicio de sus funciones se guió siempre en un marco de institucionalidad. La suya fue una gestión orientada por criterios académicos de excelencia que han beneficiado a nuestra comunidad. Durante su gestión destaca la creación de consensos en torno al trabajo universitario, el fomento a nuevas instancias de trabajo colectivo en docencia y la consolidación de las áreas de investigación. Así como agradecer el trato y convivencia cordiales por los que siempre se distinguió.
Mención especial merece el Lic. Guillermo Ejea Mendoza quien, basado en criterios de servicio académico e institucional y a pesar de algunas resistencias ha sabido conducir con eficiencia las tareas operativas y administrativas de la Unidad, mejorando en buena medida las condiciones que afectan la vida cotidiana de sus miembros.
Agradezco, también, a los universitarios que participaron como candidatos en el proceso de designación del Rector de Unidad, por sus valiosas ideas que, sin duda, redundarán en la fortaleza de nuestra institución, así como a todos los miembros de la comunidad de la UAM-Azcapotzalco que, desde distintas visiones, contribuyeron a enriquecer con sus propuestas y observaciones este proceso.
De manera personal, quiero agradecer a mi esposa, María Concepción Huarte, a mi hija Victoria, a mis padres Javier y Dolores, a mis hermanos Javier, Alfredo y Arturo y a mi suegra Ma de Lourdes ese apoyo emocional siempre tan requerido para enfrentar etapas como la vivida recientemente y la que hoy inicio.
La Universidad Autónoma Metropolitana enfrenta los retos asociados al cambio social del país. Para ello, cuenta con un modelo educativo que responde a las exigencias académicas que demanda el momento.
Su dinámica institucional permite asumir compromisos y planear condiciones a fin de contribuir a la formación de los requerimientos cognoscitivos crecientes que signan el desarrollo del mundo contemporáneo.
La UAM, como universidad pública, es una institución comprometida con la formación integral del individuo. No sólo provee a sus egresados de conocimientos, habilidades y competencias en los campos científico y tecnológico, sino que también les proporciona valores humanísticos y sociales que les permiten aportar soluciones para su convivencia y desenvolvimiento profesional en un marco democrático, libertario y tolerante.
Considero que la mejor forma de responder a la confianza que la sociedad ha delegado a la universidad pública, es mediante la obtención y evaluación de resultados con calidad en las diversas actividades que realiza nuestra universidad. En este sentido asumo el compromiso de impulsar todas aquellas acciones que permitan valorar nuestros resultados académicos tanto interna como externamente.
La Unidad Azcapotzalco cuenta con una historia académica relevante. Jamás ha renunciado a fortalecer su docencia, pero tampoco ha sido solo docencia. La investigación es parte integral de nuestra vida universitaria, tenemos importantes avances que se reflejan en una amplia inversión en capital humano, la transformación de la infraestructura y la reorganización de sus áreas. Por estos motivos, estamos en condiciones de consolidar resultados que muestren el perfil de la Unidad, en donde se observe la vinculación docencia e investigación, el desarrollo de posgrados, una nueva fase de la preservación y difusión de la cultura y en la vinculación de la academia con el entorno social.
En los años por venir, deberemos consolidar el conjunto de las actividades en la Unidad Azcapotzalco a partir de reconocer la diversidad académica y los desarrollos desiguales, en el marco del fortalecimiento de la colegialidad y los compromisos asociados a metas.
En materia de docencia, los alumnos serán en todo momento el centro de nuestro ejercicio universitario. Por ello, para aumentar su calidad y pertinencia con respecto a las exigencias que el conocimiento demanda en la formación de profesionistas, promoveré una cultura de actualización de planes y programas de estudio. De tal forma que, nuestros estudiantes puedan formarse bajo el principio de excelencia y como egresados, puedan integrarse con éxito a un mercado de trabajo cada vez más competido.
Fomentaremos la formación y consolidación de colectivos de profesores dedicados a la docencia, que por su actividad permanente generen círculos virtuosos en el ejercicio de esta función. En tales espacios se procurará la presencia de mecanismos para que nuestros profesores-investigadores tengan oportunidad de desarrollo en líneas de conocimiento. Promoveré mayor vinculación entre las labores de docencia e investigación impulsando los principios matriciales e interdisciplinarios de nuestra organización universitaria.
Para el logro de lo anterior, será necesario profundizar la discusión y definición de acciones en la docencia, especialmente en materia de evaluación, mejoramiento de los procesos de enseñanza-aprendizaje y en la creación de condiciones para ello. La discusión y aprobación de las Políticas operativas de docencia en el Consejo Académico de nuestra Unidad, será por esto, de vital importancia.
La investigación en la perspectiva integral del modelo UAM, será impulsada para fundamentar la tarea esencial de formar recursos humanos. Esto se sustentará en la perspectiva de fortalecer, por una parte, la vinculación de la investigación con la docencia y, por otra, a la investigación generadora de conocimiento que permita dar soluciones a los problemas sociales principales.
Así, será una preocupación fundamental, el que las actividades de investigación estén vinculadas de manera clara con la docencia desde el nivel de la licenciatura, fortaleciendo así, la formación de recursos humanos bajo una óptica de largo plazo.
La investigación tiene como una de sus potencialidades de mayor alcance, la creación, el fortalecimiento y la consolidación de los posgrados, que sustentados en sus cuerpos académicos, permite formar recursos humanos en líneas específicas y especializadas del conocimiento científico y tecnológico al más alto nivel. Para que esta potencialidad se concrete, se impulsarán acciones que nos permitan crear y consolidar los programas de posgrado atendiendo, por un lado, a indicadores de calidad y, por otro, observando el aspecto de la diversidad de nuestra comunidad académica. Esto implica que el posgrado será entendido en el contexto del modelo integral de la UAM.
La investigación es, a su vez, un proceso de creación y aportación al conocimiento científico y tecnológico. Es fundamental que nuestra investigación obtenga resultados de excelencia que nos permitan un nivel de competitividad nacional e internacional en la generación de conocimiento y de opinión sobre los principales problemas de la sociedad actual, así como de aportar soluciones a los mismos.
Las áreas de investigación son espacios institucionales estratégicos para el desarrollo de nuestra universidad, ahí se da la convivencia fundamentada en objetivos académicos que permiten, con creatividad, generar nuevo conocimiento científico y tecnológico. Las áreas de investigación serán una de nuestras prioridades. Consolidarlas y vincularlas a redes e intercambios de investigadores, será nuestra tarea. En ello se centrarán nuestros esfuerzos por alcanzar resultados.
En el ámbito de las Políticas de Fomento a la Investigación, habrán de reconocerse las diferencias en el grado de desarrollo de nuestros cuerpos de investigadores, y, al mismo tiempo, establecer compromisos en los que se asiente de manera clara la situación de la cual se parte y los objetivos por alcanzar.
La política de preservación y difusión de la cultura estará dirigida a fortalecer la presencia de los resultados de la actividad académica en la sociedad. Al mismo tiempo, acercarse a la experiencia del arte y conocer las diversas manifestaciones culturales que nos determinan, son elementos fundamentales en la formación integral de nuestros alumnos y en el mismo desenvolvimiento cultural de nuestro personal académico y administrativo. Por ello, hacer de la Unidad Azcapotzalco un centro de cultura destacado, será parte de nuestras metas.
Vincular nuestras actividades con el entorno es una tarea que todos reconocemos. Pero hacerla efectiva demanda recorrer un doble camino: por un lado, comprometer a los colectivos en la búsqueda de soluciones aplicables a problemas que aquejan a los tomadores de decisiones externos y, por otro, sensibilizar a éstos en cuanto a la pertinencia y calidad de la investigación aplicada y para el desarrollo que caracteriza a nuestra Unidad.
Los profesores-investigadores, ubicados en las divisiones académicas son generadores de nuestra oferta en la política de vinculación con la sociedad, empero, ésta no queda complementada si no tenemos en cuenta que es el alumno el centro de la misma.
Así, habremos de fomentar una política que nos permita implementar proyectos integrales de servicio social, la vinculación de los profesores a través de los resultados de sus proyectos docencia e investigación, la aplicación del conocimiento científico-técnico en la solución de problemáticas concretas, al igual que en la prestación de servicios de consultoría y de oferta de educación continua, tanto para la sociedad como para nuestros egresados.
Inicio la gestión como rector de esta Unidad, con la intención de fortalecer la convivencia académica entre los miembros de nuestra comunidad. Por lo tanto, convoco a nuestros profesores investigadores, trabajadores administrativos y estudiantes, para que se sumen a un proyecto en donde lo académico forme nuestras preocupaciones, y en el que nuestras diferencias se ventilen en un marco de respeto dentro de los cauces institucionales que hemos creado.
En el ejercicio de mis responsabilidades, apoyaré el trabajo universitario que se signifique por sus características académicas; impulsado ante todo, por los principios universitarios. Orientaré mis esfuerzos a alcanzar la excelencia académica y promoveré los consensos necesarios para generar los círculos virtuosos que mejoren nuestra eficiencia.
Una convivencia armónica de la comunidad universitaria demanda un ejercicio incluyente, donde el éxito acompañe a nuestros académicos en la búsqueda, transmisión y difusión del conocimiento. En donde nuestro estudiante reciba una formación de alto nivel y aumente sus elementos de identidad institucional.
En la creación de una Universidad del conocimiento se requiere concordia, bondad y compromiso institucional de sus miembros. Un ambiente de convivencia académica nos permitirá reflexionar en torno del desarrollo futuro de la Unidad y de su compromiso social.
Para enfrentar los retos que presenta a nuestra actividad el cambio social acelerado, contamos con la voluntad de nuestros académicos; sin su creatividad, sin su experiencia y sin su imaginación desaprovecharemos la oportunidad de incidir en la creación de una nueva sociedad.
En este sentido, hago un llamado público a la comunidad para que nos integremos de manera decidida en un esfuerzo colectivo, amparado en los valores que orientan y dan sentido a nuestra Universidad: la democracia, la tolerancia, la pluralidad, el respeto a la diversidad y el compromiso compartido con el trabajo académico y con nuestra institución para alcanzar un buen desempeño.
Muchas gracias.