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INTRODUCCIÓN.
Este documento presenta de manera resumida el estado que guarda la amplia gama de actividades que son desarrolladas por la comunidad académica y las instancias de apoyo a la labor educativa que tiene encomendada la Unidad Iztapalapa. En particular, se destacan aquellas actividades que son el soporte institucional y sobre las cuales se enfoca la atención de la actual administración: la docencia, la investigación y la preservación y difusión de la cultura. Desde luego, este documento también pretende señalar aquellos aspectos donde los avances han sido insuficientes o marginales y que nos llevan a reflexionar sobre alternativas que reviertan tales situaciones.
Las labores docentes, de investigación, las características y estructura de su planta académica, la formación de nuestros estudiantes, la vinculación con la sociedad, las actividades culturales y el estado que guarda la infraestructura de apoyo a las actividades académicas son algunos de los temas que se abordan en el presente informe y donde la comunidad universitaria: profesores, alumnos y trabajadores administrativos, verán reflejado el fruto del esfuerzo realizado durante el periodo que se informa, que ha sido notable pero con la convicción que nos queda mucho por realizar.
La oferta de educación que nuestra Unidad ofrece en sus tres divisiones académicas a los egresados del nivel medio superior, es variada en opciones de disciplinas y carreras, pero limitada a 15 mil alumnos. La población del nivel licenciatura ha mostrado en los últimos años una disminución como consecuencia de una mayor exigencia en los criterios de aceptación y a las altas tasas de deserción, agravadas éstas últimas como consecuencia de la situación socioeconómica que atraviesa el país.
La información disponible indica que la UAM-I no se encuentra entre las primeras opciones de los alumnos de las escuelas preparatorias de la zona oriente para realizar sus estudios superiores. Es pertinente fortalecer vínculos y promoción en los centros de enseñanza a nivel medio superior del entorno inmediato, con sus profesores y alumnos de manera que éstos se conviertan en promotores de nuestra Universidad.
Se han realizado esfuerzos importantes en la formación de nuestros alumnos de licenciatura y posgrado pero los resultados siguen siendo insuficientes, los índices de retención y titulación en el nivel de licenciatura así como el tiempo que se emplea para concluir estudios no reflejan la excelencia de la planta académica en que se sustentan las labores docentes. Sin duda hay que replantear la forma en que se está conduciendo esta actividad, de manera que en plazos razonables se puedan mejorar los resultados de la misma.
A nivel Institucional, de Unidad y Divisional existen criterios y normas que encauzan las actividades docentes y que reflejan las particularidades y problemáticas de cada entidad académica, así como los métodos y formas más adecuados para abatir rezagos y elevar la eficiencia en cuanto a planes y programas de estudio, índices de retención y conclusión de estudios e inserción al mercado laboral. La comisión encargada de analizar los avances y experiencias de la Unidad Iztapalapa en la aplicación de estas políticas, presentó su informe de avances donde se plantean puntualmente los problemas, estrategias y acciones que cada División Académica de la Unidad Iztapalapa deberá llevar a cabo en los próximos años para avanzar en este aspecto.
Una política común es la permanente actualización y adecuación de los planes y programas de estudio del nivel de licenciatura, la evaluación y acreditación de los mismos por instancias externas y la incorporación de los posgrados al Programa Integral de Fortalecimiento al Posgrado (PIFOP) y al Padrón Nacional de Posgrado (PNP), con la finalidad de que la oferta educativa de la Unidad sea de calidad y pertinencia y con posibilidad de ser apoyada con financiamiento complementario.
Otro rubro que ha merecido la atención de la Unidad y Divisiones Académicas, es el reforzamiento de los programas de becas y tutorías que promuevan la permanencia y mejoren la retención y egreso de alumnos, además de reconocer el esfuerzo y capacidad de los alumnos sobresalientes que están por concluir sus estudios. Las estrategias de atención para mejorar el proceso educativo de los jóvenes que asisten a nuestra Unidad, requieren abordar cuestiones que van más allá del contenido y estructura curricular y de apoyos y estímulos de índole económica, se requiere complementarlos con programas que atiendan aspectos de orientación psicológica, salud reproductiva, comunicación y autoestima, etc. Estos apoyos se han organizado dentro del Programa Integral de Calidad y Bienestar (PICABI) y el Programa Jóvenes, Sexualidad y Salud Reproductiva, que representan un invaluable medio para atenuar cierta problemática de índole social y familiar que aqueja a los jóvenes y que obstaculizan el proceso educativo. Adicionalmente a estos programas, en el presente año se espera poner en funcionamiento uno más de atención odontológica, para el cual se firmó el convenio de colaboración con la Unidad Xochimilco y se tienen en proceso de adecuación los espacios e instalaciones en los cuales se dará atención a la comunidad universitaria.
La Unidad Iztapalapa se ha convertido a través de los años en un recinto académico caracterizado por una planta académica altamente habilitada e integrada a grupos de investigación con importantes logros y reconocimientos. A este respecto, la Unidad continua realizando esfuerzos para estimular a nuestros profesores a seguir superándose realizando estudios de posgrado e incorporarse al ámbito de la investigación, lo cual conduce en forma natural a ingresar al Sistema Nacional de Investigadores y a fortalecer las actividades docentes.
El futuro de nuestra institución es impensable sin considerar la renovación de la planta docente. Por ello, la universidad tiene que generar criterios claros para el ingreso, permanencia y promoción de las futuras generaciones de académicos, cuya participación permitirá la renovación paulatina y la continuidad del proyecto institucional, conservando la calidad y excelencia académica.
En el año de 2004, los profesores que obtuvieron reconocimiento a perfil deseable a través del Programa de Mejoramiento del Profesorado (PROMEP) de la Subsecretaría de Educación Superior e Investigación Científica (SESIC), recibieron el apoyo económico para la realización de sus actividades académicas además de una favorable calificación y apoyo a los cuerpos académicos que solicitaron su registro en redes de intercambio académico.
Es esencial ampliar la experiencia cultural de la comunidad universitaria y en especial de nuestros alumnos, ya que su formación no debe limitarse a la instrucción académica que recibe durante su estancia en la universidad. Las actividades culturales fomentan en las personas la formación de espíritus creativos y sensibles a las manifestaciones del quehacer humano; la creación y recreación artística como el teatro, danza, música y las artes plásticas, además de promover el acceso a la cultura universal y al conocimiento de las diferentes expresiones contemporáneas del arte mediante su difusión, son parte fundamental de la formación de las personas. Éstas y cualquier otra actividad que manifieste el espíritu creativo del ser humano, deben estar al alcance de la comunidad universitaria para que enriquezca y complemente su formación y preparación académica.
La Unidad, ubicada en una zona con población de escasos recursos económicos, culturales y educativos, tiene amplias alternativas para incidir en el desarrollo de este entorno. Se observa en la zona oriente de la ciudad un deterioro de las relaciones sociales y del medio ambiente, si bien la Delegación Iztapalapa ha visto un progreso industrial y comercial en los últimos años, la situación cultural y educativa no muestra la misma dinámica de desarrollo. A este respecto, la aportación de la Unidad ha sido mínima y se requiere de una mayor participación tanto en el ámbito cultural como en el académico.
La vinculación con los diversos sectores sociales es un aspecto fundamental para la realización plena de nuestra misión como Universidad Pública. Los vínculos de la UAM-I con su entorno deben contemplar diferentes aspectos y niveles de manera que nuestra presencia e influencia sea más rica y diversa, con esquemas de colaboración y participación donde haya beneficios mutuos, que permita sentar bases sólidas y permanentes. A través de los años, las divisiones académicas han logrado construir relaciones y vínculos con instituciones públicas y privadas, con los sectores productivos, con las organizaciones de la sociedad civil y con en el ámbito académico nacional e internacional. Sin embargo, para consolidar estos vínculos se requiere de un mayor soporte institucional que garantice su continuidad. La Coordinación de Vinculación Académica ha desarrollado una intensa actividad al respecto ampliando la participación del sector académico.
Ampliar las perspectivas y potencialidades de estos vínculos es un reto que debe asumirse y continuar trabajando al respecto. Algo imperativo es involucrar una mayor participación de los alumnos en los diferentes proyectos, con la finalidad de que estas actividades enriquezcan su formación profesional y encaminen su inserción en el ámbito laboral.
La investigación, docencia y difusión de la cultura exigen servicios, infraestructura y equipamiento acorde a las necesidades académicas y una administración eficiente.
La infraestructura de apoyo a las actividades académicas de la Unidad, ha sido en los últimos años sujeta a una intensiva actividad de mantenimiento preventivo y correctivo, debido a que las condiciones de deterioro generaban continuas fallas en el funcionamiento, lo que afectaba el adecuado desarrollo de las labores y actividades de la comunidad universitaria. Adicionalmente, se manifestó inquietud y preocupación de algunos sectores estudiantiles y de académicos en cuanto a la seguridad que ofrecían las instalaciones en condiciones de emergencia. Esta situación, motivó un acuerdo con las divisiones académicas para garantizar la disponibilidad de recursos que atienda las necesidades de mantenimiento y seguridad de las instalaciones de la Unidad. Este acuerdo se ha ratificado en los últimos años para continuar con las labores de conservación y mejoramiento de la infraestructura física de la Unidad, que por su relevancia para las actividades cotidianas debe mantenerse en forma permanente. Agradezco a las Divisiones su amplia disposición y colaboración en este programa.
Lo anterior, también debe contemplar la construcción de un ambiente agradable que permita y propicie la sana convivencia de la comunidad; que los espacios comunitarios inviten a alumnos y profesores a permanecer y disfrutar del entorno, que sean los lugares de reunión y de esparcimiento donde los lazos que dan forma al tejido social se fortalezcan.
Las instalaciones y servicios de la biblioteca de la Unidad han sido objeto de una amplia reestructuración enfocada a soportar de manera más eficiente los requerimientos de servicios documentales por parte de alumnos y profesores, el sistema ALEPH ha permitido un control más eficiente de los trámites, ahorrando tiempo y mejorando el servicio a los usuarios. La instalación de este sistema se promovió en las otras unidades de la Institución, con lo cual se han obtenido beneficios adicionales como ahorros en la suscripción de revistas y bases de datos, además de la ampliación del acervo electrónico disponible y la facilidad para acceder al mismo.
La informática y las comunicaciones han adquirido una relevancia cada vez mayor en todos los ámbitos sociales y la educación no es la excepción. La Unidad Iztapalapa dispone de una infraestructura al respecto que es fundamental para la realización de sus tareas cotidianas, la cual ha sido objeto de una amplia inversión en los últimos años a fin de remontar rezagos.
El personal administrativo y de apoyo es de suma importancia para el cumplimiento de las funciones sustantivas de la universidad, la complejidad y diversidad de las actividades que se tienen cotidianamente en la institución requieren de personal capacitado y de una organización eficiente del trabajo para responder con prontitud y eficacia a las demandas de servicio por parte de la comunidad. Éste es un ámbito en el cual se debe trabajar arduamente estableciendo programas de capacitación permanente, mejorando los mecanismos y formas de comunicación, así como promover condiciones para que el personal de base y de confianza haga suyos los valores que distinguen a la institución y se sienta orgulloso de pertenecer y trabajar para ella.